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miércoles, 17 de junio de 2015

DOS KABRAS, EN TIERRA DE OSOS (7-8-2014)


«EL II ULTRATRAIL DESAFIO SOMIEDO  O  U.T.D.S. 2014.»


Pintaba bien esta carrera. Un recorrido exigente, 86 km en Alta Montaña, un desnivel acumulado de 9.450 m por los montes asturianos, con sus lagos de origen glaciar, sus vaquitas y sus "ositos". 


El oso, se hizo el dormido, y no quiso aparecer en toda la carrera. Sin embargo, su fantasma, nos estuvo persiguiendo en todos los puntos de corte...


Pero ni mi compi, JuanMa ("Papi"), ni yo, llegábamos en las mejores condiciones... Él, porque hacía tres semanas escasas, que había corrido la Ehunmilak (168 Km y 11.000 m+), y yo, porque todavía seguía con molestias en mi rodilla, después de una estúpida e inexplicable caída.


Para una andaluza de Jaén, acostumbrada a los montes secos llenos de olivos, ver estos paisajes frondosos y verdes es todo un espectáculo...


Cuando llegamos al pueblecito de Pola de Somiedo, un enclave precioso, encajonado entre montañas, esperamos hasta que se iniciara la entrega de dorsales y nos instalamos en el cámping.



El camping estaba a 100 metros de la meta, en un sitio impresionante.



No dormí mucho esa noche, por no decir "casi nada", entre el ruído de la gente charlando, con corredores que estuvieron llegando y montando tiendas casi hasta la una de la madrugada y la incomodidad del conchón inflable.

En cuanto a mi carrera, igual que JuanMa, la puedo dividir en dos partes. En la primera, iba bastante "floja"... No tenía apenas energía para subir las cuestas y tenía mucho dolor en la rodilla, a pesar de haberme tomado antiinflamatorios.

En la segunda mitad, después de tomar un diclofenaco de 100 mg e ingerir algunos alimentos sólidos, como nubes, una barrita, un gel y onzas de chocolate, me empecé a sentir mejor.

Uno de los momentos más difíciles para mí, y también para JuanMa, fue la subida al Cornón (2.188 m, Km 24). Empezó lloviendo chirimiri... y bajó la temperatura muchísimo... Cuando me puse el chubasquero, ya me encontraba empapada... La subida era infernal, no podía con mi cuerpo, y me estaba entrando un frío horroroso... Cuando me quise poner los guantes, era demasiado tarde... Estuve un buen rato, hasta que conseguí ponérmelos, porque mis manos parecían de trapo.




Las paredes verticales de algunos macizos y collados impresionan. En el Cornón, la subida se hacía próxima a uno de estos precipicios...


Miré para un lado, y vi un precipicio de vértigo, con un nevero, y miré para delante para no sufrir. Subíamos por una ladera que si te desplazabas medio metro a la izquierda, ya no lo contabas.

He de decir que nunca he pasado tanto frío en una carrera. Tenía los labios hinchados y no podía ni hablar... Lo del material obligatorio que exigen en las carreras de montaña, no es ninguna tontería, y deberíamos llevarlo todos, porque una manta térmica, unas mallas largas, unos buenos guantes y un gorro, te pueden salvar de una hiportermia. A mí, aparte de la ropa, me salvó un gel que me dio Papi. Se lo agradezco enormemente. Ese azúcar extra, mi hizo entrar en calor, y pude salir de la hipotermia. 

El Sol, las nubes, la lluvia y el arco iris, se sucedían sin tregua. Imposible encontrar la ropa perfecta sin tener que estar haciendo ajustes durante toda la carrera.


No sería ésta, la única vez que pasaría frío. Después, cuando pasábamos por los Lagos de Saliencia, (espectaculares lagos glaciares), el cielo se volvió a encapotar, y empezó a llover bastante fuerte, hasta que llegamos al avituallamiento de la Farrapona (1.707 m, Km 56). Allí nos dijeron que no podíamos subir al pico de los Bígaros por la tormenta y que nos teníamos que desviar por la carretera hasta el próximo pueblo (Saliencia). Hacía mucho frío allí, y en cuanto comimos algo, seguimos para no morirnos de frío.

Íbamos "chorreandito"... El pobre Papi, iba mal porque tenía problemas con las zapatillas y no podía correr bien. La verdad es que hizo un esfuerzo enorme durante toda la carrera, porque su cuerpo no estaba recuperado de todas las caídas de la Ehunmilak, y además, sus plantas estaban muy doloridas por no haber escogido bien las zapatillas...

Cuando salía el sol, te sobraba todo... Y después del frío que habíamos pasado, se agradecía mucho.


Por muy lindas que sean las fotos, como ver alli mismo los Lagos del Valle, no hay nada...


En general, la carrera, me ha encantado... Los paisajes, preciosos, de alta montaña, bosques de hayas, robles, valles, los glaciares, los teitos o cabañas de los pastores, algunas formaciones de rocas espectaculares, prados... Todo lleno de vacas, testigos de nuestra aventura... muy educadas ellas... se apartaban de los senderos para que pasásemos, salvo algunas, que se hacían las remolonas... ¡jajaja!!!!


Nuestro público admirador en la alta montaña... Tan traileras como nosotros y también jugándose la vida por los colladines...


Y los asturianos, muy "apañaus"... Son gente dura, acostumbrada a los rigores de esa zona.


En cuanto a los avituallamientos, podrían ser bastante mejorables... Se echa de menos una comida caliente o un caldito para entonar el cuerpo. Otra pega que veo, es el poco tiempo que dan para terminarla. Nosotros íbamos con el "osito" detrás, como lo llamábamos, pisándonos los talones, y no teníamos tiempo para nada.

Una cosa curiosa que nos pasó, es que Papi se cayó dos veces, por resbalones, y los bastones (telescópicos) no fueron capaces de sujetarlo, porque (el derecho) se le metió dos veces para adentro. En la segunda caída, cayó con todo su peso sobre su antebrazo. Le dolía, pero no le dio demasiada importancia. Cuando fue a ducharse, una vez terminada la carrera, se horrorizó al ver que tenía los huesos del codo desplazados. Llamó a la organización cuando ya se había desmontado toda la infraestructura de ambulancias y atención sanitaria, y le dijeron que fuera al día siguiente a Oviedo. A la mañana siguiente, cuando se miró el brazo, los huesos habían vuelto a su sitio y se habían alineado, milagrosamente... ¡No veas!!! ¡Qué cosas pasan!!!


Él, todavía, no se había dado cuenta, pero en la foto de entrada en meta, puede verse cómo el húmero se dirigía hacia abajo del codo, y el cúbito y el radio hacia arriba.


He hecho "dos nuevos amigos" en esta carrera, que seguro que me acompañarán en otras pruebas y entrenamientos... Se llaman BASTONES... ¡jajajá!... Me han ayudado mucho a subir cuando no podía, y a no caerme en bajadas con barro y piedras mojadas. Los que me dejó JuanMa eran rígidos, y tal vez por eso, no he sufrido sus problemas.  


Si te enseñas a usar los bastones, se convierten en una prolongación de tus manos.


Ahora me siento un poco rara, después de estas carreras... Mi cuerpo está extraño. Mi estómago está revuelto. Siempre tengo hambre... Me siento un poco vacía... como si me faltara algo... Es una sensación difícil de explicar. Un ultratrail es una sensación tan intensa, que incluso no puedo dormir durante los días siguientes, y a la vez, siempre tengo sueño...


Mi cara, como la Sibila Délfica de Michelángelo en el momento de entrar en Meta.


Esta vez, el osito, no ha podido con nosotros. Podríamos haber hecho una carrera mejor, pero somos "FINISHERS", y podemos sentirnos orgullosos. No tuvieron tanta suerte, una pareja de Cáceres que los descalificaron en meta por llegar 3 minutos después de las 12 de la noche. Esto, no debería ocurrir. No es justo que después de más de 17 horas de esfuerzo y de sufrir dos tormentas en los peores sitios del recorrido, no entres en la clasificación.


Quería subir al pódio, pero no en estas condiciones. Pero cuando pronuncian tu nombre, no eres capaz de reaccionar, y el "Depa" (el del sombrero), hace contigo lo que quiere.


Al final, también subí al podio, y me dieron un regalito que no podré materializar, pero sí conservar, pero por el "mérito" de haber quedado la última de las mujeres que entraron, (8 de las 10 inscritas), pero tal y como se dieron las cosas, con un "canto en los dientes" por haber entrado, y que todo, al final, se haya quedado en un susto, con arreglo "milagroso".

Y ¡cómo no!...  AGRADECER a todas las Kabras Lokas su apoyo y su cariño...

Ahora, un DESCANSITO... Y... Hasta la PRÓXIMA...

PAQUI SERRANO.



Video oficial del Desafío Somiedo 2014 en YouTube

Presencia de Paki en el minuto 4:10 y en 9:14. Papi en el 9:11.

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